Instrumentos financieros y productos bursátiles ¿Cuáles son?
Eduardo Castejón, egresado en Estudios Liberales por la Universidad Metropolitana, especializado en América Latina y su relación con China.-
¿Cuáles son los más comunes? ¿Cómo funcionan? ¿Dónde los puedo encontrar? Una pequeña introducción al mundo financiero mediante sus elementos más básicos.
Fuente: Tecnología press
Considero muy importante este artículo por dos razones:
En Val-u enseñamos finanzas, y explicar este tipo de conceptos es parte de nuestra labor.
Creo que todo el mundo debe conocerlos, sobre todo por los beneficios y oportunidades que brindan si son bien utilizados.
Antes de entrar de lleno con estos productos e instrumentos, ¿donde funcionan? La respuesta más sencilla es: en el Mercado de Capitales, o mercado bursátil, ese mismo que Andrés Urquiola una vez llamó el mercado municipal. Algunos cotizan en este y otros son medios para participar de él.
El mercado bursátil es un conjunto de instituciones y organizaciones, un mercado centralizado y organizado donde diferentes empresas y compañías negocian títulos valores o activos para recaudar financiamiento para sus operaciones y, a cambio, los inversores reciben una compensación en forma de dividendos a partir de sus ahorros o en valor por sus inversiones.
También, y es importante para este artículo, existen los Derivados. Estos son instrumentos financieros distintos a los que se ofrecen en las Casas de Bolsa, pero algunos de ellos cotizan en el mercado, como los Futuros o las opciones, que veremos en breve. Sin más previas, aquí una lista de algunos instrumentos y productos bursátiles:
Acciones:
Suelen ser lo primero que pensamos cuando hablamos del Mercado de Capitales o de Bolsa. Son básicamente partes de un negocio, lo que nos otorga “participación” en él; misma que permite obtener beneficios en forma de dividendos, si la empresa los otorga y, también dependiendo del tipo de acción, un voto en la asamblea general de la compañía.
Bonos:
Es otro de los productos bursátiles más comunes. Son activos financieros usados para financiar operaciones sin entregar una parte del negocio o de la organización emisora, pero que prometen devolver al acreedor el monto de compra más un porcentaje de interés previamente fijado. Son emitidos por las empresas pero principalmente por los gobiernos, que dividen la deuda pública en pequeños pedazos y los entregan a las personas bajo la promesa de pagarles. Es el instrumento de renta fija más común.
Ahora entraremos en el mercado de derivados, éstos son instrumentos financieros que cotizan en bolsa y se operan a través de brókers.
Suelen ser lo primero que pensamos cuando hablamos del Mercado de Capitales o de Bolsa. Son básicamente partes de un negocio, lo que nos otorga “participación” en él; misma que permite obtener beneficios en forma de dividendos, si la empresa los otorga y, también dependiendo del tipo de acción, un voto en la asamblea general de la compañía.
Opciones:
El derivado más común. Como su nombre anuncia, representa el derecho -u opción- a comprar un activo y una obligación a la otra parte a venderlo. El comprador debe pagar una prima para obtener la ‘opción’ de compra a un precio estipulado (conocido como strike) y la transacción se realiza al momento de vencimiento, pero existe la posibilidad de vender esta opción, que puede representar una ganancia si el mercado sube antes de la venta. Para el vendedor, la ganancia se da con el pago de la prima.
Futuros:
Se hicieron famosos hace unos meses por los precios del petróleo. El futuro es básicamente un contrato, establece una obligación de compra y de venta a un precio establecido en una fecha determinada, lo que lo hace ser un ‘futuro’. Son originalmente del mercado de los commodities y asegura la venta para el vendedor y el precio para el comprador. Como dato curioso, en el 2009 se transaron más de 600 millones de barriles de petróleo diarios en la NYMEX, que representaban un 700% de la demanda.
Swap:
Implicando también un contrato, los Swaps, como su nombre indica, son un intercambio de dinero que puede venir determinado por algunos aspectos como las tasas de cambio de las monedas en el contrato y de las tasas de interés. Es básicamente una forma de protegerse de las variaciones de estas dos tasas y evitar pérdidas. Una forma de verlo es cuando se emite un bono, que tiene un interés establecido, y que para evitar pérdidas ante las variaciones económicas, el emisor trata con una tercera parte un intercambio periódico de monedas sobre el monto total del bono. Por ejemplo, si una empresa emite un bono por 500 millones a una tasa del 7% a 5 años, en este periodo es posible que al año tres, las tasas de interés del mercado bajen al 2%, por lo que la empresa pagaría por sus bonos una tasa de interés mayor que si lo emitiera en ese tercer año. Ante ello la empresa establece un swap con un tercero (normalmente un banco de inversión) para intercambiar divisas y evitar estas pérdidas.
Ahora quiero comentar un poco sobre los productos bursátiles que ofrecen algunas casas de bolsa: los fondos, estos permiten a los inversores obtener un rendimiento sobre sus ahorros y suelen ser gestionados por las Casas de Bolsa o actores reconocidos.
ETF’s:
Estos famosos productos cotizan en bolsa, de hecho su nombre es ‘fondos cotizados’ (Exchange-Traded Funds). Se diferencia de los otros fondos colectivos porque sus participaciones cotizan en tiempo real en la bolsa de valores y son fácilmente liquidables. Su intención es replicar el comportamiento de un índice bursátil -un promedio, ponderado o no- de activos financieros, pudiendo ser de renta fija o variable y ofrecer rendimiento a sus inversores.
Fondos de inversión:
No cotizan en bolsa pero ofrecen a sus participantes un rendimiento sobre sus ahorros. Los ofrecen las Casas de Bolsa a sus clientes y su objetivo es alcanzar una mayor rentabilidad posible uniendo el capital de varias personas para adquirir activos financieros que devuelvan dividendos. También pueden ser usados para salvaguardar efectivo y esquivar la inflación, así como preservar patrimonio. No obstante, estos fondos no garantizan rentabilidad, sobre todo en el corto plazo.
Fondos mutuales:
Son creados por compañías y casas de bolsa y son gestionados por un gerente de fondos, que toma el dinero de un número de participantes del fondo (inversores). A diferencia de los fondos de inversión, que suelen buscar la ganancia por sobre todo, los fondos mutuales, aunque suele ser un término paraguas, buscan preservar el dinero de los inversores a través del tiempo, también logrando ganancias para estos y la empresa que lo emite. También busca diversificar para disminuir el riesgo, que suele ser más aceptado en otro tipo de fondos. Además, estos fondos están regulados por varias instituciones públicas para proteger al inversor.
Fondos de Riesgo:
A diferencia de mis otros dos ejemplos, este tipo de fondos, conocidos también como “venture capital”, son fondos de inversión que más que admitir el riesgo, buscan aprovecharlo. Este tipo de fondos no invierten en empresas tradicionales o establecidas para ofrecer seguridad sobre la inversión, sino para maximizar las ganancias mediante la inversión en emprendimientos novedosos o “StartUps”. Es por ese motivo que el riesgo de estos fondos es mayor, de hecho es común que de diez inversiones que realicen, sólo un par de ellas tenga éxito, de tal forma que compensen las pérdidas de los otros.
Por todo ello, estos fondos suelen ser atractivos para personas con mucha capacidad financiera y para aquellos que disfrutan del riesgo.
A diferencia de mis otros dos ejemplos, este tipo de fondos, conocidos también como “venture capital”, son fondos de inversión que más que admitir el riesgo, buscan aprovecharlo. Este tipo de fondos no invierten en empresas tradicionales o establecidas para ofrecer seguridad sobre la inversión, sino para maximizar las ganancias mediante la inversión en emprendimientos novedosos o “StartUps”. Es por ese motivo que el riesgo de estos fondos es mayor, de hecho es común que de diez inversiones que realicen, sólo un par de ellas tenga éxito, de tal forma que compensen las pérdidas de los otros.
Por todo ello, estos fondos suelen ser atractivos para personas con mucha capacidad financiera y para aquellos que disfrutan del riesgo.
A diferencia de mis otros dos ejemplos, este tipo de fondos, conocidos también como “venture capital”, son fondos de inversión que más que admitir el riesgo, buscan aprovecharlo. Este tipo de fondos no invierten en empresas tradicionales o establecidas para ofrecer seguridad sobre la inversión, sino para maximizar las ganancias mediante la inversión en emprendimientos novedosos o “StartUps”. Es por ese motivo que el riesgo de estos fondos es mayor, de hecho es común que de diez inversiones que realicen, sólo un par de ellas tenga éxito, de tal forma que compensen las pérdidas de los otros.
Por todo ello, estos fondos suelen ser atractivos para personas con mucha capacidad financiera y para aquellos que disfrutan del riesgo.
Existen muchos otros instrumentos financieros y productos bursátiles, como los forward o los fondos de cobertura; pero en este artículo quise poner sólo los más básicos con el objetivo de instar a seguir investigando y descubriendo el mundo de las finanzas y los mercados bursátiles. Varios de éstos pueden ser usados en nuestro mercado venezolano, en la Bolsa de Valores de Caracas.
En Val-u ayudamos a escuelas a enseñar finanzas a estudiantes, profesores y familias. Conoce más haciendo click AQUÍ.