Los “Osos” y los “Toros” en el mercado financiero
Samuel Domínguez, Economista y aspirante a especialista de finanzas por la UCV, con experiencia en riesgo bancario. Apasionado por las finanzas y los mercados financieros.-
Es bastante curioso que en los mercados financieros escuchemos frecuentemente los términos Bull y Bear, para indicarnos cómo es la dirección de la tendencia en un determinado tiempo. Si es alcista se le llama Bull, si es bajista se le denomina Bear. Ahora bien, ¿de dónde provienen dichos términos?, ¿por qué se le llama así?
Fuente: Pixels
Origen De Los Términos
Hay diversas hipótesis sobre el origen de ambos términos. Lo que se puede decir es lo que cada una de estas teorías aportaron para describir una tendencia de baja o de alza en los indicadores.
En el siglo XVIII, la piel de osos era muy demandada dada a fríos intensos que hacía en el norte de Inglaterra, esto implico que intermediarios particulares las vendieran antes de poseerlas en un precio específico, los cazadores se enfocaron tanto en esta práctica que los llevo a tener un exceso de ofertas de estas pieles, finalmente estos intermediarios pudieron negociar precios más bajos y así quedarse con un margen más grande de utilidad, así surgió el acrónimo de corredores de piel de oso. Este término encantó a los profesionales de la bolsa que vendían acciones en corto, así el término de “Bear” se empezó a utilizar para los especuladores del mercado a la baja.
Otra hipótesis, a finales del siglo XIX en California, USA, los osos Grizzlies se utilizaban en una forma de espectáculo para pelear en una fosa frente a un toro de Lidia. Aunque estas “diversiones” fueron prohibidas en 1835, la Bolsa de Valores los inmortalizó por las analogías de sus movimientos, los toros embisten hacia arriba usando sus cuernos, movimiento que simula la subida de precios y gráficas con tendencia de alza en los mercados financieros, por el contrario, los osos atacan con sus arpas hacia abajo simulando tendencias bajistas.
Entre otras hipótesis tenemos:
El origen etimológico germano de la palabra “toro” sería “bhel-“, que vendría a decir “hincharse, crecer”.
El término «toro» originalmente se refería a una compra especulativa de las acciones en la expectativa de que se elevaría. El primer uso registrado del término se remonta a 1714. El Diccionario Inglés Oxford cita un uso en 1891 del «Bull Market» a largo plazo. El diccionario etimológico relaciona la palabra “toro” a “inflarse, hincharse” y data su connotación del mercado de valores para 1714.
En la Inglaterra Isabelina se organizaban extraños combates para entretener al público en los que se ponían a luchar entre sí a un toro contra un oso y se hacían apuestas. De esta lucha del oso contra el toro derivó el término de toros para aquellos que consideran que el mercado va a subir, por simple contraposición al oso en sus batallas circenses. Es la misma historia que durante la fiebre del oro de California; los toros y osos eran arrojados a un ring para pelear como entretenimiento para los mineros. Los modernos mineros actuales son un grupo de corredores de bolsa y profesionales de los servicios financieros.
También dicen que se trata de la postura que tienen estos animales cuando están a cuatro patas: el cuello de los toros tiene un ángulo hacia arriba y el cuello de los osos se inclina hacia abajo.
Los toros y osos en términos del mercado de valores se hicieron de uso común entre los financieros en 1720 durante un escándalo financiero conocido como la “Burbuja de los Mares del Sur”, que giraba en torno a un plan de inversión especulativo de la Compañía de Mares del Sur.
Sin embargo, otra teoría es que un mercado bajista se refiere a la naturaleza competitiva de dos familias de banqueros famosos: Barings (como en el Barings Bank) y las Bulstrodes.
Significado
El Mercado Bull hace referencia a una tendencia alcista, es decir, en la que los precios de los activos están subiendo o se espera que lo hagan en el futuro. Esta tendencia se caracteriza por el optimismo y la confianza de los inversores. Un mercado Bull puede darse por varios motivos: el estado de ánimo de los inversores, la recuperación tras una crisis, la estabilidad política o un boom económico.
El Mercado Bear tiene una tendencia bajista, quiere decir que los precios caen y las expectativas acerca de los mismos también son negativas para el futuro. No hay acuerdo común sobre esta tendencia, pero, de forma general, se acepta que un mercado está a la baja cuando su precio desciende un 20% o más en un plazo de, al menos, dos meses. Las principales razones para encontrarse con esta tendencia pueden ser: una crisis económica o el colapso de una burbuja financiera. Al contrario que en los mercados Bull, los inversores muestran desconfianza e incertidumbre.
No existe un método seguro para predecir los mercados de toros y osos. De lo que estoy seguro es que, con el tiempo, todo mercado bajista termina y los mercados se recuperan, pero también de que todo mercado alcista termina cayendo. Invertir siempre implica riesgos.
¿Qué simbolizan el toro y el oso en la Bolsa?
El toro indica el perfil del inversor comprador, con confianza en el mercado, buscando comprar acciones para poder conseguir beneficios, con dicha actitud, el mercado suele subir de forma natural y se consolide. Por otro lado, el oso simboliza el perfil del vendedor, desconfía de la situación del mercado, espera que el mercado caiga, tenga tendencias bajistas y se puedan aprovechar de ello.
Otros animales en la bolsa.
Los lobos de Wall Street: Entre las metáforas sobre el comportamiento del mercado bursátil y sus participantes encontramos también el lado negativo, como la participación en el mercado con fines ilícitos, representado por el lobo.
The dead cat bounce (“El rebote del gato muerto”): Se le llama así al comportamiento en el que los mercados, tras una caída importante, experimentan una subida en un determinado momento de tiempo. Sin embargo, esta subida se hace de una forma poco sostenible y, por tanto, las caídas se suceden de nuevo.
Unicornios: Son compañías generalmente tecnológicas, capaces de generar un valor superior de 1.000 millones de dólares en su etapa inicial de lanzamiento al mercado sin haber abierto una oferta en la bolsa de valores, ni contar con financiamientos de inversionistas u otras empresas de gran tamaño.
Ovejas: Inversores que, como su nombre indica, se mueven al son de los balidos del rebaño. Basan sus inversiones emocionalmente, de oídas, sin una estrategia.
Black Swan (“Cisne Negro”): El término proviene del ensayista y estadístico Nassim Nicholas Taleb, en su obra del mismo nombre; la metáfora hace referencia al hecho de un evento de gran impacto socioeconómico, el mismo fue inesperado e impredecible para la sociedad.